La receta de hoy en un clásico imprescindible para los amantes del chocolate, el brownie. Este pastelito, cuya traducción sería "marroncito", nació en Estados Unidos en el siglo XIX y existen numerosas teorías sobre su origen. Una de las que más fuerza tiene es que el brownie surgió de un accidente culinario cuando al repostero se le olvido agregar levadura al bizcocho. A este error le debemos el poder disfrutar de este delicioso pastelito de chocolate que acepta infinidad de variaciones. Se le pueden añadir nueces, pistachos, mantequilla de cacahuete, dulce de leche etc. y para acompañarlo nada mejor que nata montada y una bola de helado encima. Bon apetit!!!
113g chocolate
43g mantequilla
2 huevos
50g azúcar
1 pizca de sal
½ cucharadita de extracto de vainilla
30g harina
1 cucharadita de agua
40g nueces
En un cazo ponemos la mantequilla, el chocolate, el agua y calentamos hasta que se derritan. Mientras tanto batimos los huevos con el azúcar, después añadimos la vainilla y continuamos mezclando hasta que todos los ingredientes se unan. Posteriormente echamos el chocolate con la mantequilla sin dejar de batir y los ingredientes secos(harina y sal) tamizados. Por último agregamos las nueces troceadas (es opcional) y vertemos la mezcla en un molde, lo ponemos en el horno, previamente precalentado y lo dejamos por unos 20 o 30 minutos a una velocidad media baja.
Transcurrido el tiempo, lo sacamos del horno, dejamos enfriar y decoramos al gusto. Puedes espolvorear azúcar glass por encima, sirope de chocolate o nata montada. Con estas cantidades saldrán unos cuatro trozos grandes, si lo queremos más grande solo tenemos que doblar las proporciones de cada ingrediente.
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